Tres décadas de actividad y ni un rasguño. Sex Museum se han mantenido intactos, impertérritos -tozudos, incluso-, ante el paso del tiempo. Con pequeños pero constantes cambios los madrileños pueden presumir de haberse convertido en […]

Tres décadas de actividad y ni un rasguño. Sex Museum se han mantenido intactos, impertérritos -tozudos, incluso-, ante el paso del tiempo. Con pequeños pero constantes cambios los madrileños pueden presumir de haberse convertido en […]