El Winter Indie City volvió a dar en el clavo. Ya lo venían anunciando desde hace varios meses como una apuesta segura, y finalmente, llegó la cita con Gin Lady, en Octavo Arte. El sexteto sueco eligió Segovia como la última fecha de su gira por España, donde por lo que se esperaba que este concierto fuera espectacular. Además, aprovecharon para presentar su último disco «Camping with bodhi», y para celebrar sus diez años de carrera.
Una vez los seis componentes del grupo se subieron al escenario, el local se trasladó de repente a una época en la que el rock and roll vivía sus años más brillantes, allá por los 70, cuando menos no era más, ya que las canciones iban por caminos de locura, psicodelia y exceso, por lo que se sabía cómo comenzaban, pero no cómo iban a acabar, ya que una guitarra o una batería podían cerrar con un solo brutal. Aquellos tiempos parecen tan lejanos que no hay que perder la oportunidad de aprovechar su visita y disfrutar con grupos como Gin Lady.
Ya lo demostró Jesper Lindell y su banda, cuando vinieron a Segovia antes del parón de diciembre. Y es que el rock sueco no se había visto en una situación tan saludable, casi desde tiempos de Europe. Al igual que Lindell, Gin Lady no escatima en instrumentos, y su puesta en escena es bárbara, comenzando por su cantante y guitarrista Magnus Kärnebro, con su larga barba y su sombrero «amish»; y continuando por el bajista, que daba un toque noventero que respondía a lo ecléctico del grupo; teniendo muy presente a su guitarrista de apoyo, que hizo auténticas virguerías con sus guitarras. Mención aparte, aunque permanecían escondidos, no fue por quitarles protagonismo al teclista, al batería y a la percusionista. Lo seis aportaban su magia, cada uno a su estilo, pero siempre lo hacían en positivo, todo a favor del grupo. Al final, los suecos regalaron un par de canciones extra a un público muy exigente y entregado, y dejándolo cansado, pero contento.
