Nacida en Bilbao, María Alonso-Allende, comienza sus estudios de piano con M. C. Menchaca y continúa con la concertista Maya Pawelec-Gietzen y posteriormente con Pilar Suárez. En el año 1999 comienza sus estudios en la Universidad de las Artes “Folkwang” en Essen (Alemania) con los profesores Ludger y Doris Maxsein así como con Thomas Günther. Desde 2006 a 2009 realiza un postgrado en la especialidad de pianista acompañante en la Escuela Superior de Música de Mannheim (Alemania) con el pianista americano Scott Faigen.
Participa en masterclasses con Arie Vardi, Hans Dainzer, Leonell Morales, Ekaterina Dershavina, Irwin Gage, M. A. Epstein, Julja Botchkovskaia, Ana Luisa Chova, Rubén Fernández Aguirre y los Cuartetos Mandelring y Verdi.
Es ganadora de la beca para pianistas del V Curso Internacional de Música Isaac Albéniz de Camprodón y premiada en el concurso “Jugend Musiziert” de Alemania.
Ha trabajado como pianista repertorista en la Universidad de las Artes “Folkwang” de Essen y en la Escuela Superior de Música de Mannheim, así como en la Escuela Superior de Mainz (Alemania), también trabaja para el concurso “Jugend Musiziert”, y para clases magistrales de los solistas de la Semper Oper de Dresden y para el Estudio de Canto “Gesangsatelier Gabriela Labanda” de Düsseldorf (Alemania). Ha colaborado como pianista con la compañía de danza “Neuer Tanz” de Düsseldorf así como con la Royal Academy of Dance en numerosas ocasiones. Desde 2009 trabaja como pianista repertorista para el Conservatorio Superior del Liceo en Barcelona (España), colaborando también con entidades como la Joven Orquesta Nacional de Cataluña (JONC), la Asociación de Flautistas de Cataluña (Afcat), la Orquesta de Cámara de Granollers y el curso Enfocant el So. Ha sido pianista para masterclasses de Emmanuel Pahud, Sílvia Careddu, Hagen Quartet, Olivier Patey, Stefan Dohr, Pavel Vernikov, Jacques Zoon, Gustavo Núñez, Ramón Ortega y Harri Mäki, entre otros. Desde 2011 trabaja como pianista para el “Festival Pablo Casals” de Prades de Conflent (Francia), acompañando las clases de entre otros Michel Lethiec, Karl Leister, Isaac Rodríguez, Nobuko Imai, Patrick Gallois, Jurek Dybal, Felix Renggli y Christian Altenburger. Paralelamente ofrece regularmente recitales con diferentes solistas y formaciones de cámara tanto en España como en el extranjero, habiendo tocado con solistas de la talla de Olivier Patey, Stefan Dohr, Anton Weinberg, Isa Jiménez, Joaquín Arrabal,Christian Farroni e Inga-Britt Anderson.
El próximo 31 de Julio, María Alonso-Allende acompañará al piano a Joaquín Arrabal Zamora al contrabajo actuará en San Juan de los Caballeros dentro del programa del Festival Joven del Festival MUSEG de Segovia, donde interpretarán un repertorio titulado “El elefante que soñó con ser un cisne” con obras de Clara Schumann, Rossini y Brahms.
Nuestro compañero Josechu Egido ha tenido la oportunidad de hablar con María Alonso-Allende para conocer un poco más a la artista.
LA ENTREVISTA
María Alonso-Allende empezó su carrera musical muy joven, apenas siendo una niña. ¿Por qué el piano y no otro instrumento musical?
Desde muy pequeña me fascinaba el sonido del piano, por eso lo escogí.
¿Cómo es ser músico profesional? ¿Cuántas horas diarias se pueden llegar a dedicar al estudio? ¿Cuál es el panorama actual para un músico solista?
En realidad, ser músico profesional es como cualquier otro trabajo, tienes unos horarios laborales que se compaginan con tiempo de estudio personal para prepararte tu repertorio. Se pueden dedicar desde 1 hasta 10 horas de estudio al día dependiendo del instrumento, la disponibilidad y del momento concreto en que se encuentre el músico; si es músico de orquesta, repertorista, o prepara una audición, un recital, un concierto de cámara… actualmente los músicos solistas combinan diferentes actividades como dar conciertos con puestos de orquesta, docencia y colaboraciones de cámara, por ejemplo.
A parte de una excelente técnica y posición ¿qué tiene un músico excelente sobre el escenario?
Sobre el escenario me parece tan importante como la preparación física la preparación mental a la hora de afrontar una situación de concierto, que es la que potencia la concentración y el control en el momento de la interpretación.
En más de una ocasión oímos que el instrumento es un órgano más del músico ¿Qué piensas al respecto? ¿Cómo se transmite sin hablar con palabras en un concierto?
Pienso que objetivo final de un intérprete es conocer tanto su instrumento que parezca una extensión de él, y en mi opinión la finalidad absoluta de la música y del arte es transmitir emociones y sensaciones sin palabras, así que esto es algo que la música hace por naturaleza.
¿Hay diferencias entre un músico profesional dedicado a la música clásica y un músico profesional dedicado a la música ligera?
Para mí hay diferencias de contenido, como puede haberlas entre un jugador de fútbol y uno de baloncesto, los elementos que se manejan son diferentes pero el nivel de exigencia y profesionalidad son los mismos.
¿Qué vamos a disfrutar en tu concierto del MUSEG 2018?
En nuestro concierto de cámara que presento junto con el contrabajista Joaquín Arrabal mostraremos una selección de música romántica de compositores alemanes del siglo XIX.
¿Puedes contarnos alguna anécdota en algún concierto? ¿Cuál es el sitio más exótico donde has actuado?
Ahora mismo solo se me ocurre una musicalización en vivo con música de J. S. Nach de una película de F. W. Murnau que presenté junto con la flautista holandesa Mirjam Plas en la cripta de la iglesia Posthoorn en Ámsterdam.
En muchas ocasiones se echa en falta la presencia de público joven en los auditorios ¿Por qué ocurre esto? ¿Qué se puede hacer?
Creo que para abrir la música clásica al gran público las formas tradicionales de presentación tienen evolucionar, con formatos de concierto más dinámicos, con colaboración del público, de temática interdisciplinar y en diferentes escenarios, no solo en auditorios. De hecho, esto ya se está haciendo en muchos lugares con excelentes resultados.
¿Cuáles son tus planes para el resto del 2018 y comienzos del 2019? ¿Algún concierto importante? ¿Festivales? ¿Salidas al extranjero? ¿Grabar un nuevo disco quizás?
Para los próximos meses tengo proyectos y conciertos en festivales con diferentes formaciones en el territorio peninsular, y para el 2019 estoy concretando todavía proyectos.
¿Crees que el mundo digital va a acabar con el mundo de la música tal y como lo conocemos hoy en día? ¿Cuál crees que es el futuro del músico?
Al contrario, pienso que la era digital ha facilitado muchas cosas, el acceso a la música de mucha gente que antes nunca la habría tenido, por ejemplo. Creo que como ha ocurrido en épocas pasadas, los avances y la tecnología aportarán recursos nuevos que ayudarán e inspirarán a los músicos a evolucionar en sus formas de expresión.
¿Cuál ha sido tu mejor momento / recuerdo en la música?
La primera vez que escuché a András Schiff tocando las variaciones Goldberg de Bach.