A menudo, la belleza, es lo que queda por el camino, después de haber vivido sin miedo momentos de verdad. Era tiempo de mucho dolor, y el disco venía para curar.
Este es un disco de luz, que viene de lo oscuro, pero también del amor. De muchos tipos de amor. Para Tòfol Martínez el “blues es el directo, es la conexión, una cosa casi espiritual, de meditación, de estar solamente allí y, hacer pop, es otra manera de curar, de hacer un proceso con las cosas que pasan en mi vida o a mi alrededor…“
Cuando comienza su segundo disco “1979”, un disco de Blues, surge, de pronto, y de forma inesperada, la necesidad de ir al Pop. Y surge con tal fuerza que lo hace de una forma desazonadora: como duda. ¿Es este un disco de blues, de pop, sólo de pop, se pueden mezcla los dos géneros en el mismo álbum? “No se puede”, es la conclusión a la que llega el artista “o al menos yo aún no puedo”. Lo que empezó hace tres años ve la luz el 4 de mayo de 2018. 36 meses –“que es un 9, un parto” – dice riéndose a toro pasado. En el camino, un tercer disco de Blues: “No panic!”.
“La Llave” es el single principal del disco, que no tiene un tema con el título del álbum, quizá por una cuestión de estructura al haber varios singles. Al escuchar el disco se puede oír la música que hace estructura, la que se va a bailar, la de ensimismarme, la de llorar. La que se llora.
La producción corre a cargo del artista italiano afincado en Paris, Marco Cinelli y algunas de las baterías están a cargo de su hermano, Alejandro Cinelli, afincado en Londres.
Colaboraciones excepcionales de Lichis, y de Litus y, claro, de su banda de blues “Tófol Martínez Blues Band”, con Agustí Borrell y Josep Buch.
“La Verdad y la Belleza”, nació en Tossa de Mar, un pueblo de la Costa Brava, y de las noches de amor y dolor, de las copas con los amigos, de los conciertos y sus noches y de los días en la carretera. Del Mediterráneo, de Barcelona y también de Madrid. Del Blues, y también de los ecos del pop. Aquellos días de guitarra al lado de Orozco o de música al lado de Rojas.
“Aquel día en que fuimos a recoger a Marco a El Prat, las primeras sesiones de grabación, la armonía en todo, el miedo, ¿el terror?, el valor, la camaradería, la amistad. El equipo. La intensidad. La insoportable intensidad, esa disposición a dejarte trozos de carne, de arteria, de tendón, de víscera, de cartílago, de marfil. De momentos en los que, sin aire, se queda uno como un pez boqueando sobre la cubierta de la barca de Cutu.” Se puede leer en el libreto que acompaña al disco en una edición cuidadísima.
“La Verdad y la Belleza” es un disco de amor, de autodescubrimiento, de viaje y de tránsito. Y de generosidad y de agradecimiento. Y de sanación. “La Verdad y la Belleza” es Tòfol Martínez explosionado. Abierto. Dado. Entregado, comulgado, curándote, en algún rincón, alguna herida.
Nuestro compañero Josechu Egido ha hablado con Tòfol Martínez en «La mejor Tarta de Chocolate del Mundo» para saber más de su trabajo «La verdad y la belleza» y de sus planes de futuro. Esta es la entrevista completa para «Aquí se toca otra».